Durante esta semana vamos a contaros algunas diferencias importantes entre Baño Turco ( o baño de vapor) y Sauna Finlandesa.
Actualmente saunas y baños de vapor forman parte de un estilo de vida saludable. Entre sus más destacados beneficios se incluyen la eliminación de toxinas, relajación muscular y mental, reducción de agua en el organismo.
1. La principal diferencia entre sauna y vapor es la presencia de agua. El baño de vapor se caracteriza por tener una alta concentración de humedad, mientras que la sauna es calor seco. Los diferentes tipos de calor ayudan en distintos aspectos: el baño de vapor mejora el Sistema Respiratorio, mientras que el calor seco de la Sauna favorece la mejora del Sistema osteo-articular.
En Gold Place Spa podéis encontrar ambos y os explicaremos todos sus beneficios y como es la mejor manera de hacerlo para ti.
Hoy vamos a conocer más diferencias importantes entre Baño Turco ( o baño de vapor) y Sauna Finlandesa.
• La temperatura de la cabina de sauna oscila entre los 70 y 90 grados. En los baños de vapor la temperatura no excede los 70 grados.
En Gold Place Spa consideramos nuestro circuito como un espacio de Salud donde mejorar nuestro organismo y relajar cuerpo y mente. Por eso nuestro Baño Turco no excede los 60°C y la Sauna Finlandesa los 70°C. De esta manera cualquier persona puede hacer uso de ellas (si tienes alguna patología, te indicamos la mejor forma de hacerlo) con los mismos beneficios.
En Gold Place Spa podéis encontrar ambos y os explicaremos todos sus beneficios y como es la mejor manera de hacerlo para ti.
¿Para qué son buenas la Sauna Finlandesa y el Baño Turco?
Ambas opciones son excelentes para una limpieza profunda, ya que el calor abre los poros y elimina impurezas de la piel, toxinas y bacterias.
Al parecer el cuerpo sí suda sustancias tóxicas; por ejemplo, se han detectado metales pesados y bisfenol A (BPA) —un químico presente en los plásticos— en el sudor.
Ayudamos a deshacernos también de las células muertas presentes en nuestra piel. Apoyándonos después con un peeling, las eliminamos y ayudamos a nuestra piel a respirar mejor y nutrirse. Por ejemplo, absorbiendo vitaminas, como la Vitamina D, la cual absorbemos a través del sol.
¿Sabes cuanto tiempo debes estar en un Baño Turco o en una Sauna?
Pues la respuesta es, como diría un gallego, depende.
Por norma general, es decir, para un usuario sin patologías importantes, tanto los baños de vapor como de sauna deben limitarse a no mas de 10 a 15 minutos. Ambos deben usarse con moderación. ¿Y por qué decimos que depende? Pues porque el calor favorece que haya una bajada de la tensión arterial, lo que puede producir desmayos. Para personas que tengan la tensión baja o alta, no se recomienda da estar más de 5 a 7 minutos.
Lo mismo para mujeres embarazadas. Muchas mujeres nos preguntan si estando embarazadas lo pueden realizar, ya que su médico les dice que no. En Gold Place Spa hemos realizado muchos Spa con mujeres embarazadas y, es cierto que hay que tener ciertas precauciones, pero lo pueden realizar sin problema.
Otra cosa a tener en cuenta es cuando hacemos ejercicio y después queremos darnos una Sauna para ayudar a relajar la musculatura. Debemos saber que el ejercicio también baja la tensión arterial y ésto unido a la Sauna, puede ser muy peligroso. Antes de entrar a la Sauna tenemos que hidratarnos bien, incluso si es una bebido isotónica que reponen sales minerales, mejor. Además debemos bajar nuestra temperatura corporal con una ducha refrescante, ya que ayuda a bajar la temperatura corporal y estabilizar nuestra tensión arterial.
Por supuesto, NUNCA tomes este tipo de baños después de beber alcohol o en ayunas.
¿Sabes cuál es la utilidad del cubo con agua qué está en la Sauna Finlandesa y por qué no está en el Baño Turco?
Cuando entras en una Sauna por primera vez, ves ese cubo de madera con agua y te preguntas,¿qué hace ahí y para que servirá? De repente se levanta una persona y lo hecha sobre las piedras que están calentando la Sauna. Y se oye el agua ebullir ffffff... Lo que se genera al echar el agua es aumentar la humedad relativa del aire, lo que va a subir la temperatura en el ambiente, con sus posibles consecuencias como habíamos comentado.
Por tanto, lo que vamos a conseguir al e hará agua es subir la temperatura y generar más humedad, queriendo parecerse al Baño Turco.
El problema es que nunca vamos a llegar a tal grado de humedad y los efectos secundarios son peores que los beneficios.
Además de estos inconvenientes está el que juntar agua con una resistencia eléctrica no es nada bueno. No sería el primer Spa que sufre un incendio por un fallo en la resistencia de la Sauna♨️.
Y la pregunta de por qué no está en el Baño de Turco ya está contestada. El agua busca elevar la humedad y aquí ya no hay más que aumentar.
Por eso, cada zona tiene su función y si queremos un calor seco es mejor irse a la Sauna Finlandesa y si queremos un calor húmedo, es mejor irse al Baño Turco y no mezclar conceptos, que nos puede salir mal la jugada.
Otro punto a tener en cuenta es que lo ideal para disfrutar de la experiencia, es acostarse. De esta manera, todo el cuerpo se encuentre a la misma temperatura, mientras que al sentarnos, nuestra cabeza está más alta y se acalora primero, debido a que el aire caliente asciende.
Ven a visitarnos y te contaremos más cosas interesantes.